Mathiesen Centro de Distribución celebra 20 años certificado con ISO 9001 y Responsible Care
Mathiesen Centro de Distribución cumplió 20 años certificado con ISO 9001 (Sistema de Gestión de la Calidad) y Responsible Care.
En 2005, obtuvo ambas certificaciones, consolidando su compromiso con la calidad, el medio ambiente, la salud y seguridad, y el relacionamiento con la comunidad.
Recientemente, Mathiesen Centro de Distribución logró la Re-Certificación ISO 9001:2015. A través de auditoría externa, se verificó el cumplimiento de cada uno de los procesos, obteniendo un resultado de 100% conforme.
Asimismo, desde 2021, cuenta con la certificación del Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP), lo que demuestra su compromiso con la inocuidad alimentaria.
Compromiso con la calidad, la mejora continua y la orientación al cliente
Deborah Vega, Gerente de Administración y Finanzas de Mathiesen Chile, resalta que la compañía celebra un hito. “Que nuestro Centro de Distribución haya sido recertificado con ISO 9001 es un reconocimiento formal a nuestra gestión. Pero también puede interpretarse como una confirmación de que estamos haciendo bien nuestro trabajo, de manera consistente y sostenible en el tiempo”, enfatiza.
Señala que la recertificación honra el profundo compromiso del equipo con la calidad, la mejora continua y la orientación al cliente, pilares que guían sus procesos y decisiones. “Mantener este estándar exige esfuerzo, disciplina, autocrítica y la plena convicción de que siempre es posible hacerlo mejor. Por ello felicitamos a todos quienes integran el Centro de Distribución por su destacable desempeño”, dice.
Cultura organizacional basada en la responsabilidad y la prevención
Respecto a Responsible Care, Deborah asevera que esto refleja la importancia que asigna la compañía a la seguridad, la salud de las personas y el cuidado del medio ambiente. “Nos solo estamos aplicando altos estándares al respecto, sino también promovemos y practicamos una cultura organizacional basada en la responsabilidad y la prevención”, revela.
Sobre la certificación HACCP, que se ha mantenido por cuatro años, la ejecutiva señala que esto refuerza la práctica de una cultura de control de riesgos que garantice la inocuidad alimentaria. “Nos impulsa a anticiparnos a potenciales peligros químicos, físicos o biológicos. Además, contar con este respaldo entrega confianza a nuestros clientes y autoridades, ya que demuestra nuestro compromiso permanente con la seguridad, calidad y el desempeño consecuente en toda nuestra cadena de valor”, acota.
Deborah indica que “lo anterior es el resultado del trabajo riguroso y consciente de nuestros equipos, que entienden que operar de manera responsable es una condición esencial para la sostenibilidad de nuestro negocio”.
Agrega que “estos 20 años en los que hemos estado certificados han fortalecido nuestra gestión, han aportado a aumentar la confianza de nuestros clientes y socios estratégicos, y nos motivan a seguir elevando nuestras metas y a proyectar un crecimiento basado en la excelencia y la calidad”.